Por: CLEBERSON EDUARDO DA COSTA

Este libro nace de un momento de náuseas, caos existencial, en el que todo ser pensante, tarde o temprano, tiende a pasar y donde todos nuestros valores se ponen en jaque, siendo susceptibles de “roturas”, de “martillazos” ”, como nos diría Nietzsche.

Después de las náuseas y el caos, solo hay tres posibilidades:

A) Volver a ser él mismo;

B) Convertirse en patológico;

C) Trascender.

En el primero, el ser no evoluciona: quiere ser él mismo; el mismo yo siempre. En el segundo, el ser pierde la lógica de la razón y es aprisionado en su propio mundo: el mundo de las ortodoxias subjetivistas y verdades absolutas; el mundo de las ideas posesivas que llevan al ser a pseudo-estados de hiperconsciencia.

En el tercero, caracterizando un estado de ser esencialmente cualitativo, en el sentido del desarrollo de su humanización y la búsqueda de su autonomía intelectual, el ser trasciende, es decir, comienza a crear y dar sentido a su propia existencia como ser; y al mundo (en el sentido macro) en el que vives.

Deliberadamente - sin ninguna falsa modestia que impida que el ser se comprenda y se afirme como ser - opté por la tercera y así nació esta, como tantas otras obras.

Las “Poesofias”, por tanto, son obras cuyas esencias son temáticas de carácter filosófico, basadas en las epistemologías de pensadores independientes; así como en diferentes escuelas filosóficas, con el objetivo de hacer de la filosofía algo más notorio en la realidad del mundo en que vivimos. Sin embargo, trae consigo la mirada, el acto filosofante original del autor, basado en las siguientes premisas:

1) En la sociedad capitalista en la que “todo es apariencia y engaño”, como dirían, por ejemplo, filósofos existencialistas como Sartre.

2) Los valores del capital, en los que enfatizamos el individualismo y la meritocracia, se han establecido como una especie de corolario del Estado. Es decir, sistematizado como contenido ético de toda la sociedad, principalmente a través de las instituciones educativas, en las que destacamos la escuela.

En este sentido, creemos que “ciudadano” es aquel que, además de tener derechos de ciudadanía, es también aquel que participa activamente en la dirección de la polis.

Así, este trabajo tiene el propósito de posibilitar que distintos grupos sociales excluidos desarrollen caminos de sensibilización sobre temas cotidianos obvios, pero, al mismo tiempo, son complejos, paradójicos y, en consecuencia, desapercibidos a simple vista. .

Permitir la "extrañeza" y la comprensión del enmascaramiento de lo obvio; la develación de lo común, desde un punto de vista crítico, filosófico y, desde allí, poder construir estrategias para defender y superar la deshumanización, este es uno de los grandes propósitos de este trabajo.

Esperamos que pueda contribuir a la formación de una generación menos alienada; menos comprometidos con los temas sociopolíticos, económicos, humanos y humanitarios, a escala local, planetaria y, por tanto, también más conscientes, emancipados y transformadores de la realidad del mundo en que vivimos.

El autor